miércoles, 6 de octubre de 2010

Articulo de Filosofia

RACIONALISMO Y TEOLOGÍA MODERNA.

En teología se entiende por "racionalismo" la concepción según la cuál la adhesión ala fe°descansa en el conocimiento racional y la verdad de la fe se puede demostrar con argumentos de razón. Pero tampoco la credibilidad de la fe se puede demostrar positivamente. El concilio Vaticano I condenó reiteradamente tal racionalismo (cf DS 3028, 3032, 3041). Bajo el veredicto de racionalismo cae también la opinión de que la autocomunicación de Dios verificada históricamente se puede demostrar con la palabra humana. Sin embargo, lo único demostrable es la existencia de un mensaje que afirma de sí mismo que es la palabra de Dios. Aunque esta pretensión no se puede refutar últimamente con argumentos de razón, con todo, la verdad de esta pretensión sólo puede conocerse con la fe.

Racionalismo y Teologia moderna

jueves, 23 de septiembre de 2010

El Hombre en la Edad Moderna

Un rasgo característico de la modernidad es el hombre del Renacimiento, y es justamente en este marco, donde surge el humanista. Estos hombres renacentistas aprehendieron el mundo exterior por visiones instantáneas que no analizaron, pero que se impusieron a su conciencia hasta una nueva emoción. Son violentos, repentinos, radicales, movibles, contradictorios, desconcertantes, prontos en irritarse, injuriarse y desvainar la espada.
Ello se explica por que estos hombres poseen una vida intensa.
La existencia es dura, y toda en contrastes. La vida aparece rodeada de peligros, ello obliga a estar siempre dispuesto a la defensa, a tomarse la justicia por mano propia. Pero esta vida, que desenvuelve todos los sentidos dota especialmente a los hombres para las artes.

Factores que influyeron en el cambio de pensamiento de la Edad Media a la Edad Moderna.

El humanista, surge en la Edad Moderna, el cual es un período histórico que se enmarca entre la Edad Media y la Edad Contemporánea; transcurre entre los siglos XVI y XVIII, situando sus comienzos en torno a la caída de Constantinopla en 1453, al descubrimiento de América en 1492, y al fenómeno cultural del Renacimiento, en tanto que emplaza su final en el derrumbamiento de la vieja monarquía y el proceso revolucionario iniciado en 1789 ( Revolución Francesa).
El siglo XVII representó el apogeo de la mentalidad moderna, caracterizado por el absolutismo monárquico el triunfo el mercantilismo, la revolución intelectual y las guerras de religión.
El orden y la seguridad fueron considerados más importantes que la libertad y los monarcas reconocieron su derecho divino para gobernar, cuyo correlato era la obediencia ciega de sus súbditos.
La
nueva política económica: mercantilismo,
apoyaba la intervención estatal por considerarla factor propicio para aumentar la prosperidad comercial. La competencia era el fundamento de la vida económica.
Desde el punto de vista de la vida social, la característica mas importante fue la ascensión de la burguesía, favorecida por su poderío económico y su creciente alianza con la monarquía. También hubo un importante crecimiento demográfico y un debilitamiento sostenido de la aristocracia. Influyeron varios factores en un importante proceso intelectual:
º
las ideas renacentistas.
ºla nueva visión del mundo aportado por los descubrimientos.
ºhay una revalorización de la temática antigua.

Ciencia Moderna

La ciencia es un conjunto de conocimientos racionales, ciertos o probables que se obtienen mediante el empleo del método científico, esta se denomina moderna porque se desarrolla en los siglos XVI, XVII y XVIII; es decir, esta se basa en el conocimiento científico, el cual no es más que un rasgo característico de la ciencia pura como de la aplicada.

Una de las figuras importantes en la construcción de un saber radical en la ciencia fue el francés René Descartes (1596 - 1650), a quien se atribuye la fundación de la filosofía moderna que es el conocimiento y la existencia, y el desarrollo del paradigma mecanicista. Es considerado el fundador de la ciencia moderna, debido a que estableció los fundamentos metodológicos, epistemológicos y teológicos de la ciencia.

La relación que existe entre la medicina, la religión y la salud es que establecen una relación entre espíritu y cuerpo, el ser humano y los otros, el ser humano y la naturaleza, la medicina y la religión, es decir, reconocen el vínculo indisoluble entre la enfermedad, el enfermo y su sociedad.

Thomas Hobbes: Leviatán

Leviatán: o la materia, forma y poder de una república eclesiástica y civil, comúnmente llamado Leviatán (en inglés Leviathan), es el libro más conocido del filósofo político inglés Thomas Hobbes, publicado en 1651. El título del libro hace referencia al monstruo bíblico Leviatán, que posee un poder descomunal. En este libro, Hobbes establece su doctrina de derecho moderno como la base de las sociedades y de los gobiernos legítimos. Se ha dicho que el trabajo de Hobbes justifica filosóficamente la existencia del autoritarismo estatal.

Parte I: Del hombre

En esta primera parte de la obra, Hobbes comenzará por el estudio del hombre en sí mismo, para poder, a partir de ahí, estudiarlo en sociedad. Analiza el conocimiento humano, cuyo origen fundamenta en la experiencia. La experiencia, según Hobbes, se forma por la repetición de hechos que se irán almacenando en la memoria por lo que son fuente de sensaciones que permiten la producción de imágenes memorizadas. Los recuerdos son utilizados en estas combinaciones mentales y posibilitan al hombre simular los acontecimientos futuros y adquirir, por lo tanto, una indispensable prudencia. El hombre actuará según su experiencia, intentando evitar los resultados indeseados que ha sufrido en momentos anteriores.

Parte II: Del Estado

Hobbes desarrolla su idea del contrato o pacto social, desarrollado por los hombres como garantía de la seguridad individual y como forma de poner fin a los conflictos que, por naturaleza, generan estos intereses individuales. Así, a las pasiones naturales del hombre se oponen las leyes morales, siendo a su vez leyes naturales.

Parte III: Del Estado cristiano

En esta tercera parte, y por lo que respecta a las relaciones entre el poder espiritual y el poder temporal, Hobbes abogaba por la total sumisión de la Iglesia al soberano.

Hobbes investiga la naturaleza de un Estado cristiano. Esto da lugar inmediatamente a la pregunta de en qué escrituras deberíamos confiar y por qué. Si alguna persona reclama que lo sobrenatural es superior a lo civil, entonces habría caos, y el deseo principal de Hobbes es evitarlo.

Parte IV: Del reino de la oscuridad

En esta cuarta parte, ejerce una severa crítica a la Iglesia, a la cual acusaba (tras denunciar las tradiciones fabulosas que sostienen al conjunto de la mitología cristiana) de estar impregnadas, incluso, de cierto ateísmo. No obstante, y con el fin de evitar eventuales represalias y censuras eclesiásticas, en el apéndice con que concluye Leviatán intentó atemperar sus posiciones recurriendo para ello al examen de la jurisprudencia sobre la herejía.



La Alquímia y como se relaciona con la Filosofía

La alquimia occidental ha estado siempre estrechamente relacionada con el hermetismo, un sistema filosófico y espiritual que tiene sus raíces en Hermes Trimegisto, una deidad sincrética grecoegipcia y legendario alquimista. Estas dos disciplinas influyeron en el nacimiento del rosacrucismo, un importante movimiento esotérico del siglo XVII. En el transcurso de los comienzos de la época moderna, la alquimia dominante evolucionó en la actual química.

Actualmente es de interés para los historiadores de la ciencia y la filosofía, así como por sus aspectos místicos, esotéricos y artísticos. La alquimia fue una de las principales precursoras de las ciencias modernas, y muchas de las sustancias, herramientas y procesos de la antigua alquimia han servido como pilares fundamentales de las modernas industrias química y metalúrgica.

Aunque la alquimia adopta muchas formas, en la cultura popular es citada con mayor frecuencia en historias, películas, espectáculos y juegos como el proceso usado para transformar plomo (u otros elementos) en oro. Otra forma que adopta la alquimia es la de la búsqueda de la piedra filosofal, con la que se era capaz de lograr la habilidad para transmutar oro o la vida eterna.

Los alquimistas sostenían que la piedra filosofal amplificaba místicamente el conocimiento de alquimia de quien la usaba tanto como fuera posible. Muchos aprendices y falsos alquimistas, tenidos por auténticos alquimistas, gozaron de prestigio y apoyo durante siglos, aunque no por su búsqueda de estas metas ni por la especulación mística y filosófica que se desprendía de su literatura, sino por sus contribuciones mundanas a las industrias artesanales de la época: la obtención de pólvora, el análisis y refinamiento de minerales, la metalurgia, la producción de tinta, tintes, pinturas y cosméticos, el curtido del cuero, la fabricación de cerámica y cristal, la preparación de extractos y licores, etcétera. La preparación del aqua vitae, el «agua de vida», era un experimento bastante popular entre los alquimistas europeos.

Siglo de las luces (o Ilustración)

El siglo XVIII se caracterizó en Europa por su gran desarrollo científico e intelectual, y debido a ello es conocido como el Siglo de las Luces o la Ilustración.

Este nombre se deriva de los pensadores racionalistas que intentaban explicar el origen de las cosas con el uso de la razón. Entre sus principales exponentes se pueden citar a los franceses Voltaire y Jean Jaques Rosseau, o a los ingleses Adam Smith y John Locke, los que remecieron las bases intelectuales del conocimiento occidental al promover el desarrollo científico y del pensamiento racional; el resultado de sus influencias se condensó en la Revolución Industrial y los extraordinarios avances tecnológicos que este fenómeno propició.

España y sus colonias americanas no escaparon a la influencia de las Luces, a pesar de obviar las ideas concernientes al campo de la religión. El mayor campo donde el racionalismo se hizo sentir en la relación entre la metrópoli y sus súbditos fue en la administración colonial, ya que se impulsaron reformas tendientes a hacer más expeditas las actividades económicas para aumentar las arcas fiscales; esta serie de modificaciones se conocen como las reformas borbónicas. Una de las principales modificaciones fue la creación de dos virreinatos más: el virreinato de Nueva Granada y el del Río de la Plata, la que perseguía dinamizar las relaciones administrativas; además se liberalizó parcialmente el comercio.

En el caso de Chile, el mayor efecto de las reformas borbónicas fue la llegada al cargo de gobernador del ciudadano irlandés Ambrosio O’Higgins, quien impulsó una serie de obras públicas y la fundación de una gran cantidad de ciudades entre Santiago y Concepción. Entre las obras públicas podemos mencionar la construcción del puente Cal y Canto sobre el río Mapocho, y la Casa de Moneda construida por el arquitecto italiano Joaquín Toesca.